Es el siglo del concilio de Trento, la Compañía de Jesús, la reforma católica, los descubrimientos, la misión en Asia y América.
INTRODUCCIÓN
Comenzamos la Edad Moderna, que inicia en 1453 con la caída del imperio de oriente a manos de los turcos otomanos, y termina con la revolución francesa de 1789 que puso fin al antiguo régimen.
En este período de la Edad Moderna se pueden distinguir fácilmente tres momentos: el Renacimiento del siglo XVI, que coincide con la hegemonía española, con la renovación cultural del humanismo y con la reforma protestante; el siglo XVII, siglo de las monarquías absolutas y del mercantilismo 149 , siglo del barroco y de la reforma católica; y el siglo XVIII que en Francia es el siglo de la luces, y que se caracteriza por la aparición y difusión del liberalismo económico y político que acabaron con el antiguo régimen.
Las características generales de la Edad Moderna son la consolidación de las nacionalidades, la formación de los grandes imperios coloniales –como consecuencia de los descubrimientos geográficos y de la fuerza política del absolutismo-, la lucha contra toda potencia que quisiera imponer su hegemonía –hasta llegar al equilibrio europeo del siglo XVIII-, la aparición y desarrollo de las ideas liberales.
¿Y la Iglesia? A partir del siglo XVI la historia de la Iglesia reviste algunas características nuevas. La Iglesia latina y la Iglesia de Oriente seguían ya caminos distintos desde hacía siglos. Con la reforma protestante, la iglesia latina se divide a su vez en varias confesiones rivales: luteranismo, calvinismo y anglicanismo. Al mismo tiempo, como consecuencia de los grandes descubrimientos, el evangelio se anuncia en el mundo entero. En un período en que los estados se afirman y triunfa el absolutismo, la historia de la Iglesia se convierte a menudo, incluso en el catolicismo, en la historia de las iglesias nacionales.
Este siglo XVI es muy importante: es el siglo del Renacimiento literario y artístico, el siglo de la reforma protestante, el siglo del concilio de Trento, de la Compañía de Jesús y la reforma católica, de los descubrimientos, de la misión en Asia y América, de los avances científicos.
INTRODUCCIÓN
Comenzamos la Edad Moderna, que inicia en 1453 con la caída del imperio de oriente a manos de los turcos otomanos, y termina con la revolución francesa de 1789 que puso fin al antiguo régimen.
En este período de la Edad Moderna se pueden distinguir fácilmente tres momentos: el Renacimiento del siglo XVI, que coincide con la hegemonía española, con la renovación cultural del humanismo y con la reforma protestante; el siglo XVII, siglo de las monarquías absolutas y del mercantilismo 149 , siglo del barroco y de la reforma católica; y el siglo XVIII que en Francia es el siglo de la luces, y que se caracteriza por la aparición y difusión del liberalismo económico y político que acabaron con el antiguo régimen.
Las características generales de la Edad Moderna son la consolidación de las nacionalidades, la formación de los grandes imperios coloniales –como consecuencia de los descubrimientos geográficos y de la fuerza política del absolutismo-, la lucha contra toda potencia que quisiera imponer su hegemonía –hasta llegar al equilibrio europeo del siglo XVIII-, la aparición y desarrollo de las ideas liberales.
¿Y la Iglesia? A partir del siglo XVI la historia de la Iglesia reviste algunas características nuevas. La Iglesia latina y la Iglesia de Oriente seguían ya caminos distintos desde hacía siglos. Con la reforma protestante, la iglesia latina se divide a su vez en varias confesiones rivales: luteranismo, calvinismo y anglicanismo. Al mismo tiempo, como consecuencia de los grandes descubrimientos, el evangelio se anuncia en el mundo entero. En un período en que los estados se afirman y triunfa el absolutismo, la historia de la Iglesia se convierte a menudo, incluso en el catolicismo, en la historia de las iglesias nacionales.
Este siglo XVI es muy importante: es el siglo del Renacimiento literario y artístico, el siglo de la reforma protestante, el siglo del concilio de Trento, de la Compañía de Jesús y la reforma católica, de los descubrimientos, de la misión en Asia y América, de los avances científicos.